DEJÉMOSLO EN "CON EL VACÍO"
Pues sí, amigos, el que suscribe se va p'al paro a partir del miércoles uno de abril. He tenido varias semanas para ir mascando la noticia y hacer planes y buscar formas de apretarme el cinturón de ahora en adelante, pero ya se imaginan que lo único que he hecho ha sido volver a dejarme la barba. Ya tendré tiempo es la frase favorita de los procrastinadores (y procrastinación, a su vez, mi palabra favorita, por lo visto). Luego llega el día en que uno se encuentra de verdad con el tiempo que le faltaba y sin ninguna tarea que poder dejar a un lado. ¿Y qué pasa entonces? Ni idea, solo lo decía para resaltar la ironía de la situación, no para pergeñar una epístola moral de ningún tipo.
No se preocupen por el pan de mis niños, por otra parte: tengo mi indemnización reglamentaria y mi par de años de subsidio.
Desde que me enteré he estado leyendo bastante sobre el tema (el paro, me refiero), que ya se habrán enterado que está como de moda desde que afecta a tres millones y medio de personas en el país, país (y lo que te rondaré, morena). He oído lo que dice la gente desde el lado malo y me he formado una idea de cómo va a ser, que es lo único que puedo ya que se trata de mi primera vez. Todo indica un océano de tiempo, con corrientes clásicamente en tu contra, que debes cruzar sin saber si serás o no capaz. Hay grandes animales marinos que suelen emerger por la noche: la pregunta valgo para algo, por ejemplo. Hay también la nostalgia de cosas que no sabías que pudieran producírtela, como la costumbre de fantasear con cambiar de moto o de plantarte en Expolibro con tres cuartos de hora por delante. Y más animales marinos: ¿trabajaría otra vez poniendo copas?, ¿o repartiendo publicidad?, ¿y sin contrato? Parece que hay de todo, en el paro. Me encantaría ser el pibe que iba en el Beagle con Darwin y le hacía los dibujos de los bichos. Me gustaría ser el pintor viajero de César Aira, y volver para enseñarlo.
En fin, una de las primeras cosas que voy a hacer (la primera, ya estoy a medio, consiste en sacarme el carné de camionero gracias a mi sindicato y al excelso Fondo Social Europeo) es ponerme a empollar para varias oposiciones, las de auxiliar administrativo del SMS primero, y después las de secundaria del año que viene (mientras cruzo los dedos para que a/ se convoquen y b/ se abran las listas de una PUTA VEZ), y entre la concentración que necesito para ello y el plan de recorte de gastos que vamos a poner en marcha mi conexión a interné en casa se va a tener que ir, y con ello cómo no el blog. Puntualizo: las actualizaciones del blog son las que van a dejar de aparecer, no el blog en sí. Cuando la cosa mejore, volveré por aquí.
Y espero encontrarlos a todos entonces. Hasta siempre, compañeros.
(P.D.: Ya, ya sé lo que están pensando: Jo, yo conozco a alguien que tiene el trabajo perfecto para Joseda, pero claro, si lo llamo para pedirle el currículum seguro que se va a sentir muy ofendido porque va a parecer que le estoy haciendo un favor y solo le faltaba eso ahora al pobre y tal. Anden, piénsenlo otra vez.)